Crumble de albaricoques y almendra

Crumble de albaricoques y almendra

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Tarta, flan, o crumble … los postres caseros con fruta fresca son mis postres favoritos. Me encanta sentir la textura fundente de la fruta cocida, casi confitada a veces, que se mezcla con la masa dulce y suave de la preparación. El crumble, o crujiente en castillano, es originario de Inglaterra, y se ha puesto muy de moda porque es fácil y rápido de preparar. Se puede hacer de muchas maneras diferentes, variando o mezclando las frutas y los aromas como vainilla, limón, canela, etc. El crumble de albaricoques se prepara tapizando el fondo de un molde con los albaricoques troceadas, que se cubren con migas hechas con azúcar, harina y mantequilla, así que almendra molida en este caso. Puedes incorporar también algún aroma adicional tipo vainilla, que se combina muy bien con los albaricoques.

Me gusta porque:

  • La masa de las migas lleva almendra molida y piñones, así el crumble es más esponjoso y crujiente a la vez que la receta tradicional.
  • Hago 2 capas de albaricoque en el molde, con una capa de migas en el medio. Cuando se funde con el calor, las migas lían los trozos de frutas entre ellos y así el crumble se parece más a un pastel o un gratin de frutas. ¡Miam!

Trucos:

    • Puedes añadir una vaina de vainilla a la masa de las migas, se combina muy bien con los albaricoques ; o las cascaras de un limón, una cucharita de canela … elige tú lo que prefieres para variar la receta.
  • Si puedes aguantar, el crumble de albaricoques es aun mejor si dejas que repose una noche en la nevera.
Crumble de albaricoques y almendra

Tiempo de preparación: 15 minutos

Tiempo de cocción: 45 minutos

Porción: 6 personas

Crumble de albaricoques y almendra

Crumble de albaricoques y almendra

Ingredientes

  • 150g mantequilla + un poco más para untar el molde
  • 1kg albaricoques
  • 100g almendra molida
  • 100g harina
  • 100g azúcar
  • 1 pizca de sal
  • 1 vaina de vainilla
  • 50g piñones (opcional)

Preparación

    1. Precalienta el horno a 180ºC, en modo tradicional (sin el calor giratorio). Saca la mantequilla de la nevera, unta el molde y pon de lado el resto, cortada en trozos pequeños para que se ablande.
    2. Limpia los albaricoques con agua, ábrelos en 2 y quita el hueso en el medio. Luego cortalos en cuarto y pon de lado.
    3. Mezcla la almendra molida, la harina, el azúcar y la sal en un bol grande. Rasca el interior de la vaina de vainilla con un cuchillo y añade las semillas a la mixtura seca.
    4. Incorpora la mantequilla y mezcla con los manos, desmoronando la masa para crear migas, y por fin incorpora los piñones (opcional).
    5. Coloca la mitad de los albaricoques en en fundo del molde, piel abajo, la mitad de las migas por encima y repite la operación una vez más acabando con una capa de migas.

  1. Hornea durante 45 minutos.
  2. Sirve el crumble una vez que esté enfriado, directamente dentro el molde, sólo o con helado.

¡Buen provecho!

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